Las altas temperaturas, la falta de lluvia, así como los golpes de calor en estados de la frontera norte, mantienen en alerta a productores y ganaderos por la muerte de cabezas de ganado, las cuales se incrementan entre los meses de mayo y junio. En Chihuahua y Tamaulipas murieron alrededor de 462 mil animales entre 2021 y 2024, según datos de los gobiernos estatales.

El Jefe del Departamento de Ganadería de la Secretaría de Desarrollo Rural de Chihuahua, Juan Carlos Flores, comentó que en 2021 se tenía un estimado de un millón 200 mil animales en todo el estado. Sin embargo, el hato ganadero se ha reducido en 35 por ciento, aproximadamente a 420 mil, principalmente por las muertes de los animales y su comercialización.

El funcionario estatal indicó que los productores ganaderos son personas muy cuidadosas con el agua y el alimento que proporcionan a los animales, sin embargo, en muchas de las ocasiones han detectado que el golpe de calor es otro de los factores que originan las muertes de las vacas.

“Hemos detectado que, en el caso del ganado, también llega el golpe de calor, independientemente de la sequía, y de repente la vaca se cae al suelo y ya no se levanta, se queda en el suelo hasta que muere. Son situaciones que los productores no pueden evitar por más cuidadosos que sean”, comentó.

En entrevista comentó que los efectos de la sequía que afectan al estado no son tan severos por el momento, lo que ha permitido mantener la producción. Sin embargo, comentó que de cada 100 vacas que tiene el ganadero, seis mueren por la desnutrición derivado del alimento natural que consumen, así como por la falta de agua, la cual carece de nutrientes y minerales.

“Es una situación que nosotros ya hemos detectado, incluso en sondeos que nosotros mismos hemos realizado en diferentes puntos del estado y esa es la cifra que arrojó dicho estudio, por cada 100 vacas que tiene un ganadero seis se mueren bajo los efectos de la sequía”, refirió Flores.

En Tamaulipas, el presidente de la Asociación Ganadera de Altamira, Fernando Gutiérrez reconoció la falta de pastizal con el cual alimentan al ganado. La carencia de lluvia es la limitante para contar con el alimento.

“No estamos batallando todavía con el agua para beber, pero sí con los pastos, porque ya hay zonas donde ya están muy secos y muy acabados. Sobre todo, en los municipios de González, Aldama y Altamira”,

La falta de lluvia, comentó, ha originado pérdidas de hasta 50 por ciento para los productores.

 “No tengo la cantidad, pero en porcentaje yo creo que la mitad del ganado disminuyó a la mitad, el año pasado la mortalidad fue a nivel nacional, fueron muy pocas zonas las que no fueron afectadas por las sequías, en Estados Unidos también”, afirmó. 

El subsecretario de Desarrollo Pecuario y Forestal, Cuauhtémoc Amaya García, aseguró que por el momento no se han registrado muertes de ganado, sin embargo, reconoció que, entre los años 2023 y 2024, se reportaron cerca de 42 mil decesos por diversos motivos, entre ellos sequía.

Amaya García precisó que la zona con mayor riesgo de mortandad de vacas es la zona sur, la cual contempla a los municipios de Altamira, Aldama y González. 

“Hace alrededor de tres semanas cayeron tres o cuatro pulgadas en la zona sur del estado, que es lo que ahorita tiene marcada la temporada de sequía. En la zona centro y norte del estado ya llovió mucho”, indicó.

Por expreso

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