Apenas una semana después de tener una batalla campal en Reynosa, grupos del crimen organizado protagonizaron durante la madrugada y mañana del domingo un intenso y prolongado enfrentamiento.
El epicentro de los combates se registró en el ejido Palo Blanco, justo en la entrada a Río Bravo, municipio conurbado de Reynosa, donde, además, hubo narcobloqueos, lanzamiento de ponchallantas y conductores afectados.
Testigos compartieron imágenes de personas manejando en sentidos contra para evadir los enfrentamientos, presuntamente de sicarios de los Metros, de Reynosa, y los Escorpiones, de Matamoros, que se disputa el control del Cartel del Golfo.
La población de zona urbanas limítrofes entre Reynosa y Río Bravo fue aterrada por estruendos de armas largas y explosivos.
Las zonas más afectadas por las situaciones de riesgo ocupan casi todo el sector oriente de Reynosa, principalmente por la carretera que conecta con Río Bravo, donde están las colonias El Campanario, El Naranjito, Industrial, Infonavit-Industrial, Almaguer y Aeropuerto, entre otras.
A pesar de la afectación de horas, nuevamente las autoridades no emitieron alertas o desplegaron algún operativo para frenar los enfrentamientos.
Hasta las 11:30 a.m. del sábado, ya que habían terminado los enfrentamientos, la Vocería de Seguridad Pública de la Administración del Gobernador morenista Américo Villarreal dio un reporte en sus redes.