Raquel Buenrostro, secretaria de la Función Pública que pasará en este sexenio a ser la Secretaría Anticorrupción y de Buen Gobierno, dio a conocer en la mañanera de hoy los principales cambios que enfrentará esa dependencia, incluyendo la absorción de las funciones del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI).
En presencia de la presidenta Claudia Sheinbaum, Buenrostro dijo que la Secretaría Anticorrupción funcionará de forma muy similarmente a la rutina de “un policía bueno y un policía malo”, con un frente anticorrupción para castigar estos actos, y el lado del Buen Gobierno, para trabajar en la prevención de este problema.
Asimismo, adelantó con la desaparición del Instituto Nacional de Transparencia, Acceso a la Información y Protección de Datos Personales (INAI), será esta Secretaría la que se hará cargo de las labores de transparencia, siendo este el principal cambio.
El futuro de la Transparencia
Raquel Buenrostro dijo que la propuesta de reforma busca mantener que “los sujetos obligados, es decir, las dependencias y organismos de gobierno, deben “promover, respetar, proteger y garantizar los derechos de acceso a la información pública y a la protección de datos personales”.
Agregó que se está trabajando en una iniciativa de Ley General de Transparencia que evite que la Secretaría Anticorrupción sea “juez y parte” al resolver las quejas por negativas de información, por lo que se contempla la resolución de controversias con litigios en los Tribunales de Justicia Administrativa, pese a que estos dependen de los gobiernos directamente y de que las plazas de magistrados no entraron a elecciones con la reforma judicial.
Actualmente, los tribunales de Justicia Administrativa resuelven impugnaciones fiscales y negativas de todo tipo de permisos y autorizaciones que emiten los gobiernos federal, de los estados y de alcaldías o municipios.
Por lo anterior, enunció que se buscará “hacer más con menos”, con austeridad republicana; la digitalización “más grande de la historia” con política de datos abiertos y de fácil acceso; y mejor rendición de cuentas y más “confianza de la sociedad en las instituciones.
Los primeros 100 días y los 10 pilares de prevención y combate a la corrupción
Sobre cómo se desarrollarán los primeros 100 días de gobierno para esta nueva Secretaría, destacó la reestructuración de la Administración Pública Federal, así como el acompañamiento a proyectos como el Tren Maya, el mejoramiento del sector Salud y la Seguridad Alimentaria.
Asimismo, se pondrá énfasis en reformar la Ley de Adquisiciones y la Ley de Obras.
Se anunció se llevará a cabo en este período la primera rueda de negocios entre compradores públicos, mipymes y empresas sociales; y la recuperación del histórico de Compranet para consulta ciudadana.
En cuanto a los 10 pilares de la Secretaría Anticorrupción, Buenrostro destacó:
- Dignificar la carrera del servicio público a través de la formación en integridad y capacitación para el cumplimiento de sus metas.
- Dar acompañamiento preventivo a las instituciones y blindar los programas prioritarios desde un inicio.
- Modernizar a la APF para inhibir la corrupción y eficientar su desempeño.
- Consolidar compras públicas transparentes, a precios justos, que fomenten proveeduría nacional, mipymes y sostenibilidad ambiental.
- Transparencia proactiva.
- Sumar a la sociedad y al sector privado en la lucha contra la corrupción.
- Enfocar a los OIC en áreas de mayor impacto y relevancia.
- Fortalecer la cultura de la denuncia en el sector público y privado; garantizar su confidencialidad.
- Realizar Investigaciones que inhiban la corrupción.
- Combatir la impunidad. Que violar la ley sea más caro que cumplirla.