Brasil ha asumido este jueves la representación diplomática de Argentina en Caracas y, con ello, la protección de seis opositores venezolanos que están refugiados en la legación hace cuatro meses. Tanto el presidente argentino, Javier Milei, como la líder opositora venezolana, María Corina Machado, han agradecido públicamente al brasileño Luiz Inácio Lula da Silva este gesto de enorme calado político en medio de la crisis abierta en Venezuela tras las elecciones presidenciales del domingo. El relevo ha quedado simbolizado con el izado de la bandera brasileña en la residencia del embajador argentino en Caracas. Las autoridades chavistas expulsaron a todos los diplomáticos de Argentina y otros seis países latinoamericanos por expresar sospechas de fraude electoral al declarar a Nicolás Maduro vencedor sin mostrar las actas de votación.
Cuatro días después de los comicios, las autoridades electorales de Venezuela todavía no han presentado las actas que verificarían la proclamada reelección de Maduro, pese a la exigencia de EEUU, Brasil, Colombia, México y otros países, incluidos algunos que han tenido estrecha relación con el chavismo.
La decisión de Brasil, que también ha asumido representar a Perú, supone una inesperada colaboración entre el presidente izquierdista brasileño y el mandatario argentino de extrema derecha, que mantienen una relación tirante y nunca se han reunido.
El presidente Milei se ha mostrado muy satisfecho por la resolución de un rompecabezas para el que realizaron intensas gestiones diplomáticas. “Agradezco enormemente la disposición de Brasil a hacerse cargo de la custodia de la Embajada argentina en Venezuela”, ha expresado en X (antes Twitter).
El mandatario ultraliberal ha agradecido también al país vecino “la representación momentánea” de los intereses de Argentina y de sus ciudadanos en Venezuela al mostrarse confiado en que podrán reabrirla en breve “en una Venezuela libre y democrática”.
La decisión de Lula de aceptar la petición de Milei puede ser también interpretada como un mensaje a Maduro, otra vuelta de tuerca en la presión internacional para que haga públicas las actas de cada mesa electoral. Brasil mantiene una interlocución directa con todos los implicados en la crisis, incluidos los dos hombres que se han proclamado vencedores, Maduro y Edmundo González Urrutia, el elegido por Machado para vencer en las urnas al chavismo.
Los seis opositores venezolanos que se encuentran asilados en la Embajada argentina en Caracas son estrechos colaboradores la opositora Machado y trabajan en su campaña. Buscaron refugio en la sede diplomática el pasado 20 de marzo y desde entonces han intentado en vano obtener un salvoconducto que les permita una salida segura del país.
Uno de ellos, Pedro Urruchurtu Noselli, responsable de relaciones internacionales de la campaña de Machado, ha narrado en los últimos días a través de las redes sociales el asedio de las fuerzas chavistas a la legación argentina. Urruchurtu Noselli solicitó varias veces a los venezolanos que se acercasen hasta allí por temor a un posible asalto policial y denunció el corte de suministro eléctrico.
Este jueves, el citado opositor compartió una foto del izamiento de la bandera brasileña en la Embajada argentina. Están con él Claudia Macero, Mottola Magalí Meda, Fernando Martínez, Humberto Villalobos y Omar González.
Milei ha dejado de lado las grandes diferencias que mantiene con su par brasileño para destacar, en cambio, la cercanía entre ambos países: “Los lazos de amistad que unen a la Argentina con Brasil son muy fuertes e históricos”. Sus palabras llegan menos de un mes después de ignorar al presidente Lula en su primera visita a Brasil, que consistió en participar en un evento ultra con el expresidente y aliado Jair Bolsonaro poco después de anular su presencia en una cumbre de Mercosur.