El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que no habrá cambios a la dinámica fronteriza actual para los estados que comparten frontera con Estados Unidos tras la implementación del más reciente decreto del presidente Joe Biden para combatir la migración ilegal que llega desde la delimitación geográfica con México.
Al ser cuestionado durante su conferencia mañanera desde Palacio Nacional sobre cómo afectaría a estados como Tijuana este decreto, el mandatario reiteró que el acuerdo no es comercial y “no tiene que ver con la gente de Tijuana”, sino para lo que se conoce como “migración irregular”.
Asimismo, aclaró que este decreto no significa un cierre generalizado de la frontera, una situación que opinó no le conviene a nadie, ni a Estados Unidos ni a México.
Por otro lado, afirmó que ya existen canales de ingreso regular a Estados Unidos pero que se seguirán explorando nuevos trámites que permitan ayudar a combatir la migración ilegal. Entre las implementaciones destacó que se buscará que las personas puedan hacer los trámites desde su país de origen sin necesidad de llegar antes a ciudades fronterizas en México.
Finalmente, afirmó que la Organización de las Naciones Unidas “debe aplicarse a fondo” y participar más.
“Esas son de las cosas que la ONU desatiende, voltea a ver por otro lado, con todo respeto a los diplomáticos de la ONU, no se trata de estar asistiendo a congresos”, afirmó, para luego instarlos a tener más activismo para atender casos como la migración, e incluso conflictos como la guerra en Ucrania.
El miércoles, Obrador pidió a su homólogo estadounidense que retorne a los migrantes “directo” a sus países en vez de a México: “Es que estamos buscando que lleguen a un acuerdo para que, si ellos toman una decisión de deportar lo hagan directo, y estamos ayudando para que se llegue a ese acuerdo. ¿Por qué llegan a México?“.
El mandatario atribuyó entonces las medidas migratorias en Estados Unidos a las elecciones presidenciales de noviembre, cuando Biden enfrentará de nuevo al exmandatario Donald Trump (2017-2021), mientras la migración es la prioridad del electorado.