El Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo denunció que elementos del Ejército dispararon arbitrariamente a dos jóvenes que iban a bordo de una camioneta, causando la muerte de uno de ellos.
Los hechos ocurrieron la tarde del viernes 26 de abril, alrededor de las 17:40 horas, y quedaron registrados en cámaras de vigilancia en el crucero entre Héroes de Nacataz y Maclovio Herrera, frente a un albergue del DIF, detalló la organización.
De acuerdo con el Comité, Jesús Fernando y Roberto fueron atacados a tiros por los militares “en flagrante violación a la Ley Nacional Sobre el Uso de la Fuerza” ya que los jóvenes en ningún momento agredieron.
Por esta agresión murió Jesús Fernando, de 25 años, padre de dos niñas y que trabajaba como empacador en una pollería mientras que su amigo sobrevivió a cuando menos cuatro disparos que realizaron los soldados.
“Nos venían siguiendo desde la calle González, nos chocaron por atrás dos veces, luego me sometieron y me agarraron a golpes ahí en la esquina”, fue el testimonio del sobreviviente obtenido por el Comité.
La presencia de vecinos y la llegada de un grupo de periodistas hizo que se detuvieran las agresiones contra Roberto, quien dijo que el personal del Ejército quería acusarlo de haberlos atacado y pretendían “sembrarle” un arma.
Los militares que participaron en la presunta ejecución arbitraria iban en una camioneta de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena), con número económico 0916548, manejada por el teniente de Caballería Carlos Iván Fernández Barriga. En la caravana iban otras dos unidades.
Por estos hechos una mujer de 88 años, enferma de diabetes, y su hijo, provenientes de San Antonio, Texas, resultaron heridos cuando chocaron su vehículo durante la persecución. La familia denuncia que el personal militar les negó la atención médica cuando fueron impactados.
Tras la persecución que derivó en la muerte del joven, la Fiscalía de Tamaulipas inició una carpeta de investigación.
Raymundo Ramos, presidente del Comité de Derechos Humanos de Nuevo Laredo, informó que denunciará la presunta ejecución ante el presidente López Obrador y solicitará la intervención inmediata de la Comisión Nacional de los Derechos Humanos (CNDH).
“Lo más lamentable de estos hechos es que los militares que ocasionaron esta muerte arbitraria deserten del Ejército Mexicano antes que enfrenten la justicia como ha ocurrido en casos anteriores”, señaló.