El presidente Andrés Manuel López Obrador afirmó que para no caer en lo espectacular, su gobierno no pedirá al de Estados Unidos una investigación contra los agentes del Buro de Aduanas e Inmigración del Departamento de Seguridad Interior de ese país que participaron en la comisión de delitos, entre ellos el lavado de dinero y llevarse millones de dólares del narcotráfico colombiano y mexicano desde el Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México “Benito Juárez”.
Proceso publicó en la edición de enero de 2024 el testimonio –obtenido por el periodista J. Jesús Esquivel– de un informante que colaboró con los agentes Thomas LaPak y Kenny Popovits para lavar dinero y sacar millones de dólares de un narcotraficante colombiano, con el que trabajó también como “abogado”, para trasladarlos a China, Corea del Norte, Taiwán, Las Vegas y Miami, bajo el argumento de que eran decomisados.
–¿México no llamará a rendir cuentas a estos agentes y que lo pidan a Estados Unidos porque son situaciones que se llevaron a cabo en México, que incluyó un centro cambiario de divisas?
–No estamos planteando eso, estamos viendo hacia adelante, que no vuelva a suceder, por eso se llegó a un acuerdo sobre en qué condiciones se permite o se da la cooperación que necesitamos tener los dos gobiernos, los dos pueblos, por cuestiones de cooperación en lo económico, en lo social, por cuestiones de seguridad, por lo que significa nuestra frontera.
Agregó que ambos países necesitan trabajar conjuntamente, pero no subordinados, con respeto a la soberanía de México, “y eso ya no estaba siendo controlado. Ya se había perdido independencia, parecíamos un apéndice de las agencias del gobierno estadunidense. Si se tratara de abrir expedientes, por qué se cerró en Estados Unidos el expediente de ´Rápido y Furioso´, que también causó daños no sólo a mexicanos, también a estadunidenses”.
En torno a si no llamar a rendir cuentas no sería complicidad, sobre todo si los agentes estuvieran activos, respondió que no porque cuando tomó posesión decidió que se debía ir hacia adelante, sin repetir esos actos.
“También no nos detengamos porque el tiempo es muy valioso para llevar a cabo una transformación y no caigamos en lo espectacular. Esto que hizo Salinas, que mete a la cárcel a un dirigente petrolero y a un empresario y hacen todo un show y termina siendo el gobierno con más corrupción en la historia moderna y a lo mejor en toda la historia del México independiente, ¿para qué todo eso?”, cuestionó.
“¿Para qué el espectáculo? Mejor evitemos que continúe el saqueo, la corrupción, aquí están los datos. ¿Por qué se gastaba tanto y se hacía poco?, por la corrupción. Van a ir saliendo más cosas, nosotros tenemos que procurar que nunca más regrese este modelo, ese estilo de gobierno”, y señaló que la Fiscalía General de la República es la que se tendría que hacer cargo de estos hechos y tener información.
El mandatario federal destacó que los agentes de Estados Unidos en anteriores administraciones “participaban en todo, entraban sin pedir permiso, hacían lo que se les daba la gana, que no se nos olvide que los embajadores de Estados Unidos eran los que calificaban el comportamiento de las corporaciones policiacas y las Fuerzas Armadas en México”.
Incluso hay documentos donde al menos un exembajador estadunidense decía qué corporación “se porta bien” y cuáles mal, incluso tomaban decisiones sobre entrenamiento a elementos.
Decían: “Esta corporación la vamos a entrenar en Estados Unidos para que actúe de acuerdo a nuestra información, a nuestra estrategia, así fue durante el gobierno de Calderón de manera abierta, hay testimonios, esto de que paraban el Aeropuerto de la Ciudad de México, tenía el control completo del aeropuerto, pero esto no se puede hacer si no existe la complicidad de las autoridades, no es la delincuencia, o es la delincuencia organizada en contubernio con la delincuencia de cuello blanco”.