La revelación de los correos electrónicos de un agente fronterizo, en la que se da cuenta de la orden del gobierno texano para empujar al Río Bravo a los niños que intenten cruzar a Estados Unidos, contribuye a crear las condiciones para que el gobierno federal estadounidense actúe frente a estos actos de “ilegalidad” y de “inhumanidad”.
Así lo dijo este jueves Fernando García, director de la Red Fronteriza por los Derechos Humanos, durante una entrevista con Aristegui en Vivo.
“Lo que estamos viendo es el último episodio de una historia que ya lleva al menos dos años. Cuando digo esto es porque el Gobernador de Texas [Greg Abbott], junto con el liderazgo republicano de la legislatura texana, han decidido aplicar las leyes federales migratorias en Texas”, apuntó.
Señaló que Texas ha invertido más de 10 mil millones de dólares, con un despliegue masivo de tropas, de policías estatales y soldados de la Guardia Nacional, “con una narrativa distorsionada y racista”, que plantea que que Texas y Estados Unidos están siendo invadido por criminales.
“Esto último a nosotros no nos sorprende, es muy grave, muy duro, de hecho estamos reaccionando a todos los niveles, pero es algo que ya venía planteándose. El Gobernador de Texas está diciendo que los migrantes, las familias que están cruzando la frontera buscando refugio, protección, muchos de ellos asilo, son simplemente criminales. Entonces hay un proceso de deshumanización en la política texana que ya lleva al menos dos años”, enfatizó.
Para García, las revelaciones hechas por el diario Houston Chronicle demuestran el desdén hacia “la vida” por parte del mandatario, sobre todo porque se trata de niños.
“¿Qué político cuerdo puede plantear la idea de tirar de regreso a los niños al río? Nosotros ya creemos que sí hay políticos que lo pueden hacer y lo están haciendo, están planteando esto en Texas; esto también viene desde la época de [Donald] Trump, en donde se empujaron estas narrativas extremadamente violentas y racistas”, recordó.
“Al gobierno texano no le corresponde absolutamente nada de la estrategia fronteriza o migratoria, esa es parte de las prerrogativas del gobierno federal. Entonces nosotros estamos esperando que el gobierno de Biden actúe administrativamente o legalmente para frenar el operativo ‘estrella solitaria’ con la presencia masiva de elementos estatales en la frontera”, señaló.
Además, consideró importante combatir la narrativa que presenta a los migrantes como criminales, “como personas que las que se les puede matar o herir”.
Criticó el muro flotante de boyas instalado en el Río Bravo por el gobierno texano. Dijo que las boyas “son tan peligrosas que lo que va a pasar es que los migrantes van a quedar enredados y atorados” en ellas.
Esto, desafortunadamente, aumentará el número de migrantes muertos al intentar cruzar la frontera por el río, porque además de ser una “doble boya” por debajo hay una red para que no pase nadie por allí.
“Entonces lo que va a pasar es que los migrantes van a quedar atrapados ahí abajo en las redes, en las boyas. Es realmente una trampa mortal”, mencionó.
El activista señaló que en este año la cifra de muertos en la frontera entre México y Estados Unidos se acerca a la cifra récord del año pasado de 85o o 1,000 migrantes, lo que significa que tres migrantes mueren cada día.
“Este año ya llegamos a los 800 y todavía no termina el año. Entonces, lo que sí estamos viendo es que estas políticas agresivas no solo son una narrativa agresiva y racista, ya están causando muertes y daños en centenas de migrantes que están llegando a la frontera”, finalizó.