Lindsey Graham, senador republicano por Carolina del Sur, Estados Unidos, y otros congresistas presentaron el miércoles una ley para designar a los cárteles mexicanos de la droga como organizaciones terroristas extranjeras.
La ley NARCOS (Ending the Notorious, Aggressive, and Remorseless Criminal Organizations and Syndicates) cuenta con el respaldo de Graham, así como de Mike Lee (republicano por Utah), John Kennedy (republicano por Louisiana), Marsha Blackburn (republicana por Tennessee), Josh Hawley (republicano por Missouri) y Steve Daines (republicano por Montana).
La legislación contempla nueve cárteles que serían designados como Organizaciones Terroristas Extranjeras (FTO, por sus siglas en inglés), e incluye al Cártel de Sinaloa, Cártel Jalisco Nueva Generación, Cártel del Golfo y Los Zetas.
Así como el Cártel del Noreste, Cártel de Juárez, Cártel de Tijuana, Cártel de los Beltrán-Leyva y La Familia Michoacana, también conocida como el Cártel de los Caballeros Templarios.
De acuerdo con el comunicado sobre la iniciativa, la designación de los cárteles como FTO otorga a los organismos encargados de hacer cumplir la ley y a los fiscales mayores facultades para congelar los activos de una organización, denegar a sus miembros la entrada en Estados Unidos y buscar castigos más severos contra quienes proporcionen apoyo material a la organización terrorista.
“Pese a lo que diga el Presidente de México, los cárteles de la droga controlan grandes zonas de México”, afirmó Graham al presentar la legislación. “Están ganando miles de millones de dólares enviando fentanilo y drogas ilícitas a Estados Unidos, donde está matando a nuestros ciudadanos por miles. Designar a estos cárteles como organizaciones terroristas extranjeras cambiará las reglas del juego.
«Pondremos a los cárteles en el punto de mira y perseguiremos a quienes les proporcionan apoyo material, incluidas las entidades chinas que les envían sustancias químicas para producir estos venenos. La designación de los cárteles mexicanos de la droga como OTC es un primer paso en los grandes cambios políticos que necesitamos para combatir este mal”, se lee en el comunicado.
La legislación también crea un Grupo de Trabajo Interinstitucional para coordinar los esfuerzos del Gobierno de Estados Unidos para detener a los cárteles mexicanos y otras organizaciones criminales transnacionales.
La iniciativa tendría que ser debatida y aprobada en el Congreso, y posteriormente firmada por el presidente Joe Biden para convertirse en ley.
Sin embargo, el mandatario se ha mostrado contrario a una designación así y aunque no se ha descartado, la administración considera que no daría “herramientas adicionales” a las que ya se tienen para luchar contra los cárteles.