La senadora Olga Sánchez Cordero reconoció que uno de los retos para una mujer al frente de la Presidencia de México será coordinar a las Fuerzas Armadas, las cuales mantienen una cultura patriarcal.
“Las Fuerzas Armadas tienen la cultura patriarcal básicamente tatuada, eso es un hecho. Son sumamente estructurados, jerárquicos”, dijo la exsecretaria de Gobernación durante el Foro MeetPoint: ¿Presidenta? México está listo.
Sánchez Cordero afirmó que aunque hay participación de las mujeres en este ámbito, nunca han llegado a subir jerárquicamente como todos los hombres.
“Les cuesta mucho trabajo incorporar a las mujeres, entonces ese sí es un reto enorme para la próxima presidenta de la República: ganarse el respeto y liderazgo como comandanta suprema”, agregó.
Desde las teorías feministas se ha utilizado una categoría para dimensionar las causas y efectos, esto es, la masculinidad militarizada, que puede ser entendida como los valores y normas que se convierten en dominantes en algunas instituciones de control social.
A su vez, permiten que estas mantengan órdenes patriarcales, reforzando las relaciones de desigualdad entre hombres y mujeres.
La exministra de la Suprema Corte destacó que las mujeres son mejores para llevar la paz social en comparación con los hombres y eso se vería reflejado en la forma de Gobierno y estrategias de seguridad.
Políticas celebran mayor participación de las mujeres en las elecciones 2024
En el foro virtual también participaron la senadora del Partido Acción Nacional (PAN), Josefina Vázquez Mota; la senadora de Movimiento Ciudadano, Patricia Mercado y Cecilia Soto, cofundadora del Frente Cívico Nacional.
Las panelistas enfatizaron en la importancia de que para las elecciones 2024 las principales candidatas a la Presidencia sean mujeres y se hable también de una cuota de género.
Josefina Vázquez Mota destacó que la cultura patriarcal se extiende también a los partidos políticos, aunque reconoció que el avance es en la paridad de género y la creciente participación de las mujeres.
“Lo más importante es que se anula el tema de la misoginia, es decir, yo no voto por tal, por ser mujer, sino que hay una mayor concentración en la historia de vida de las candidatas y en su desempeño”, afirmó Cecilia Soto.