Tras el asesinato de dos ciudadanos estadounidenses en Tamaulipas, el embajador de Estados Unidos en México, Ken Salazar subrayó que ambos gobiernos deben trabajar juntos para castigar a los responsables y evitar que ocurren hechos similares ante los niveles de violencia en el estado.
En un comunicado advirtió que como han señalado en sus alertas de viaje, «Tamaulipas representa un riesgo por los altos niveles de criminalidad y violencia».
«Nos preocupa particularmente el control que ejerce el Cártel del Golfo en la zona conocida como la frontera chica», añadió.
El embajador lamentó los asesinatos de dos ciudadanos estadounidenses en Matamoros, Tamaulipas, y expresó su unión a la pena de sus seres queridos.
«Extendemos nuestras condolencias a los familiares de la víctima mexicana. Asimismo, sentimos el dolor por las afectaciones físicas y emocionales de las otras dos víctimas estadounidenses que siguen con vida», manifestó.
El embajador sostuvo que su prioridad más alta es la seguridad de los ciudadanos estadounidenses.
«Reafirmamos nuestra disposición para trabajar estrechamente con el gobierno de México para que los responsables en este caso sean castigados y trabajemos para que actos violentos similares no vuelvan a ocurrir», apuntó.
Expuso que es crucial mantener una estrecha colaboración entre ambos gobiernos para combatir la impunidad y enfocar recursos tanto a las autoridades de seguridad como de justicia.
«Estos hechos de violencia son un trágico recordatorio que nos exige reafirmar el compromiso de nuestros gobiernos para asegurar nuestra frontera compartida y fortalecer el combate a las organizaciones criminales trasnacionales. Sabemos que es posible, y lo tenemos que lograr, ya que de ello depende el bienestar de nuestros ciudadanos», señaló.