Poco a poco han ido saliendo más y más detalles sobre las acusaciones de tráfico y abuso sexual que enfrenta Sean «Diddy» Combs, y que, al parecer, más figuras de la farándula estarían involucradas en las actividades clandestinas que el rapero realizó por mucho tiempo.
Entre estas, se han mencionado a Jay-Z y su esposa Beyonce, además de Kim Kardashian como algunos de sus cómplices, mientras que Rihanna, Aaliyah, Usher y Justin Bieber, por mencionar algunos, habrían sido víctimas de las atrocidades del músico.
En medio de la polémica, el abogado Tony Buzbee, quien representa a más de 120 presuntas víctimas del P. Diddy, reveló que algunas celebridades de renombre están realizando pagos discretos a sus clientes para evitar ser mencionadas públicamente en las demandas relacionadas con el caso de agresión sexual.
Tony Buzbee, reveló a TMZ que grandes estrellas están a punto de ser demandadas por su firma, sin embargo, les están ofreciendo la oportunidad de llegar a un acuerdo antes de que los reclamos se hagan públicos en los tribunales.
“En cada caso, especialmente en casos como este… porque es lo mejor para la víctima, intentamos resolver estos asuntos sin presentar una demanda pública y ya lo hemos hecho con un puñado de personas, muchas de las cuales ya han oído hablar de ellas”, dijo Buzbee en un informe, según Daily Mail.
El defensor detalló, además que presentará por separado una serie de demandas, incluso en nombre de 25 menores, a partir de octubre, por lo que, en primer lugar, enviará cartas de demanda para notificar a otras personas involucradas y advirtió que perseguirá «agresivamente» a cualquiera que haya presenciado el supuesto abuso y no haya actuado para proteger a las víctimas.
“Todo el mundo está pendiente de qué otras celebridades estuvieron implicadas, quiénes serán identificados, quiénes serán descubiertos… Queremos asegurarnos de que, si nombramos a otras personas además del señor Combs, hayamos hecho nuestra tarea, porque eso va a generar un revuelo, y lo entendemos”, agregó el litigante.
P. Diddy en encuentra en prisión desde su arresto el 16 de septiembre por acusaciones de que obligaba a mujeres a participar en sesiones de sexo con hombres bajo el efecto de drogas, que a veces duraban días. Tras su detención, las víctimas han comenzado a presentar demandas legales e historias de presuntos abusos.
Por su parte, Combs y su equipo legal han afirmado que los involucrados eran adultos que consintieron en abusar de ellos y han negado las acusaciones, incluidas las de menores de edad.