Estados Unidos incautó un avión utilizado por el presidente venezolano, Nicolás Maduro, y lo trasladó desde República Dominicana a Florida tras determinar que su compra violaba las sanciones de Washington, dijo el lunes el Departamento de Justicia.
La incautación de la aeronave se produjo en medio de la continua presión sobre Maduro tras las elecciones del 28 de julio en las que logró la reelección pese a los reclamos de la oposición, que sostiene que sus recuentos de votos mostraban que su candidato se había impuesto en las urnas.
“Una vez más las autoridades de los Estados Unidos de América, en una práctica criminal reincidente que no puede ser calificada de otra cosa que no sea piratería, ha confiscado ilegalmente una aeronave que ha venido siendo utilizada por el Presidente”, dijo el Gobierno de Venezuela en un comunicado.
El avión también aparece en imágenes en el regreso a Venezuela de Alex Saab, un empresario colombiano a quien Estados Unidos indultó tras ser acusado de lavado de dinero en diciembre como parte de un intercambio de prisioneros.
Maduro, sus asociados y el sector petrolero del país están bajo fuertes sanciones de Estados Unidos, y su manejo de las elecciones ha aumentado las perspectivas de que se puedan imponer nuevas medidas.
El fiscal general de Estados Unidos, Merrick Garland, dijo en un comunicado que el avión Dassault Falcon 900EX fue comprado ilegalmente a través de una empresa fantasma y sacado de contrabando del país “para uso de Nicolás Maduro y sus compinches”.
Funcionarios estadounidenses dijeron que la incautación se hizo trabajando en estrecha colaboración con República Dominicana.
“Este es un paso importante para garantizar que Maduro siga sintiendo las consecuencias de su mala gestión de Venezuela“, dijo un portavoz del Consejo de Seguridad Nacional de la Casa Blanca.
Muchos países occidentales han cuestionado la imparcialidad de las elecciones de julio, y Estados Unidos felicitó al candidato opositor Edmundo González por haber obtenido la mayoría de los votos.