Más de una veintena de exgobernantes de España y América Latina condenaron este lunes la reforma al Poder Judicial mexicano propuesta por el partido oficial Morena para elegir por voto popular a los jueces, entre otros cambios polémicos.
Los ex jefes de Estado y de Gobierno de la Iniciativa Democrática de España y las Américas (Grupo IDEA) consideran que la reforma se presta para el servicio de objetivos ideológicos, la aplicación de un derecho penal del enemigo y el aseguramiento de la reelección indefinida de los gobernantes.
En una declaración firmada, 23 exmandatarios consideran que se trata de una reforma que implica “el debilitamiento y desmantelamiento del Poder Judicial” y representa un atentado grave contra la democracia y la vigencia de un orden constitucional.
Nos preocupan profundamente las posibles consecuencias de esta reforma en cuanto a la debida garantía de los derechos humanos y las libertades fundamentales.
Llamaron a asegurar “la autonomía e independencia de los jueces y los equilibrios y contrapesos al ejercicio del poder” y rechazaron cambios que puedan “debilitar la independencia y autonomía de los jueces, magistrados y ministros del Poder Judicial mexicano, incluido el Tribunal Electoral“.
Agregaron que la propuesta “busca implementar elecciones populares para la selección de estos cargos, haciéndolos depender de influencias políticas, comprometiendo la imparcialidad de sus ministerios y haciéndolos presa de una Justicia de opinión”.
De esta forma urgieron a un diálogo “constructivo entre todos los actores políticos y sociales de México, para que aborden cualquier necesidad de reforma judicial”.
Para los exmandatarios, entre ellos José María Aznar y Mariano Rajoy (España), se trata de una reforma que sigue “los mismos experimentados bajo las dictaduras y autoritarismos electivos emergentes en América Latina”.